La reciente discusión sobre los cambios en la normativa de vivienda de interés social en Perú pone sobre la mesa temas cruciales que afectan no solo a quienes buscan un hogar, sino también a la estructura misma del desarrollo urbano en el país. Es además importante destacar la urgencia de involucrar a todos los actores: ciudadanos, autoridades, desarrolladores y expertos en la discusión por un mejor sistema de creación de vivienda y de gestión de nuestras ciudades.
La Vivienda Social: Una Necesidad con Obstáculos
La vivienda social en Perú enfrenta desafíos históricos como la informalidad, la falta de planificación y normativas poco claras. Los cambios recientes proponen aumentar el área mínima de las viviendas a 35 m2 para la vivienda incremental y zanja la discusión de los departamentos en 40 m², lo cual podría elevar los costos de construcción y afectar directamente el precio final para las familias. Si bien esta medida busca mejorar la calidad de vida, ¿qué pasa con las personas que no pueden costear estas viviendas más grandes?
Además, las regulaciones actuales no siempre se adaptan a las necesidades y características de cada región. Por ejemplo, los materiales y diseños necesarios para la costa no son los mismos que para la sierra o la selva. Estas diferencias subrayan la importancia de tener normativas flexibles que consideren el contexto local.
El Impacto del Crecimiento Urbano Informal
En los últimos años, el crecimiento urbano descontrolado ha evidenciado la falta de regulación efectiva. Zonas urbanas sin acceso a servicios básicos o infraestructura adecuada son el reflejo de una brecha entre las políticas públicas y las necesidades reales de la población. Este fenómeno no solo afecta a las familias que viven en estas áreas, sino que también limita el desarrollo sostenible de las ciudades.
Creo que la constante crisis política y ahora institucional han generado una falta de liderazgo y comunicación clara desde el Ministerio de Vivienda genera incertidumbre jurídica. Esta situación desalienta la inversión en proyectos formales y deja la puerta abierta para que la informalidad siga creciendo.
Comparaciones que Nos Pueden Inspirar
Mientras en Perú luchamos por ajustar nuestra normativa, otros países como Chile han implementado modelos de vivienda social más efectivos. En Chile, por ejemplo, la normativa está diseñada para garantizar no solo la calidad de las viviendas, sino también la sostenibilidad a largo plazo de las comunidades. Este enfoque demuestra que es posible balancear las necesidades de las personas con la viabilidad económica de los proyectos.
La Clave: Regulación y Fiscalización Efectiva
Un punto crucial de la discusión fue la fiscalización. Sin un adecuado seguimiento y control, cualquier normativa será ineficaz. Se necesita una plataforma de fiscalización sólida que integre a las municipalidades y al Ministerio de Vivienda para asegurar que los proyectos cumplan con estándares de seguridad y calidad.
Además, es vital revisar cómo se asignan los subsidios y a quiénes se benefician. Es necesario priorizar a las familias que realmente lo necesitan o dependiendo de las características de cada sector, maximizando el impacto de los recursos públicos en el mejoramiento y crecimiento de nuestras ciudades.
Aunque las normativas y regulaciones puedan parecer temas alejados de nuestro día a día, su impacto es directo. Afectan desde los precios de las viviendas hasta la calidad de vida en nuestras ciudades. Por eso, es fundamental que nos informemos y exijamos a las autoridades soluciones claras y efectivas. Aquí hay algunas maneras en las que puedes participar:
- Infórmate: Lee sobre las normativas actuales y los cambios propuestos. Conocer es el primer paso para actuar.
- Opina y Participa: Asiste a foros públicos, debates o reuniones organizadas por gremios o autoridades.
- Exige Transparencia: Solicita que se publiquen los avances y estudios relacionados con la normativa.
- Comparte Información: Ayuda a que más personas entiendan cómo estos cambios les afectan y qué pueden hacer al respecto.
Un Llamado a la Acción
La vivienda social no es solo un problema de quienes buscan un hogar, sino de todos. Las decisiones que tomemos hoy determinarán el futuro de nuestras ciudades y el bienestar de las próximas generaciones. La normativa de vivienda no debe ser solo un conjunto de reglas; debe ser una herramienta para mejorar la calidad de vida de millones de peruanos.
Autor: Fernando Velarde
