El tema de la congestión vehicular en Latinoamérica es uno de los problemas urbanos que más afecta a la región; problema que supone pérdidas económicas por las horas laborables perdidas en el tráfico y problemas de salud ciudadana como los asociados a altas tasas de smog, estrés y problemas psicosociales de la comunidad en general.
Por poner un ejemplo, Bogotá se ubica en el puesto 5 a nivel mundial de congestionamiento y se encuentra en el puesto 1 de la región. El congestionamiento en esta ciudad registra un costo anual de hasta $ 1,000 millones y supone un promedio de 80 horas anuales en atascos para sus ciudadanos.
Uno de los sistemas más implementados para el manejo y ordenamiento vial en pro de disminuir el congestionamiento es el de pico y placa. Esta consiste en una medida de restricción vehicular para disminuir el flujo de vehículos según un horario regulado por los números de placas en una zona determinada de la ciudad. Esta medida se ha ido implementando en varias ciudades colombianas como Bogotá, Cúcuta y Bucaramanga, y en otros países como Ecuador, logrando disminuir diariamente entre 40% y 20% de vehículos en las calles.
Sin embargo, como enfatiza el Dr. Ramón Chehade para el IPDU, este sistema se debe entender como parte de un plan integral, en el cual se incluyan acciones que desincentiven el desplazamiento vehicular, promuevan el uso de transporte público, medidas de traslado compartido y uso de otros medios de transporte como bicicletas y el tránsito peatonal.
En primer lugar, se incentiva a la habilitación de infraestructura que pongan al peatón en primer plano, aprovechando que son estas las que tienen un menor costo, evitando la construcción innecesaria de puentes peatonales y by passes. Otra de las formas se que han ido empleando, es el permitir el uso mixto del suelo. De esta forma, la complejidad urbana es mayor, lo que se asocia a un mayor flujo peatonal y menor uso de vehículos. Además, ayuda a disminuir la dispersión urbana y a controlar el crecimiento de las ciudades.
Para una ciudad como Lima, estos problemas son el día a día de miles de personas. Según la encuesta LimaCómoVamos 2016, cerca del 24% de limeños pasan más de 2 horas en el tráfico diariamente para movilizarse hacia sus lugares de trabajo y/o estudio. El problema de movilidad en Lima requiere de un trabajo en conjunto urgente y prioritario, y sobretodo integral y articulado.
Fuente:
El pico y placa ayuda, pero no es la solución, Dr Ramón Chehade, IPDU.
Las ciudades y países con el tráfico más congestionado de América Latina, Redacción BBC Mundo.
Encuesta LimaCómoVamos2016, Observatorio LimaCómoVamos
Imagen, Mary Frias