Las ciudades accesibles son aquellas que apuntan a eliminar todo tipo de barrera arquitectónica que dificulte la mobilidad de personas con discapacidad. De acuerdo al último Informe Mundial sobre Discapacidad realizado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), más de mil millones de personas en el mundo (el 15% del total) poseen alguna discapacidad. En Perú, hay 3’051.612 personas con discapacidad permanente. En porcentaje, esto significa el 10,4% de la población peruana. De ellas el 57% son mujeres y el 43% hombres, según el censo 2017. Sin embargo, estas cifras no reflejarían la situación real de esta población vulnerable. Aquí VeMás te explica todo sobre este concepto y su necesidad.
Ciudades Accesibles
Se estima que el porcentaje de población en situación de discapacidad aumente conforme el crecimiento demográfico y envejecimiento poblacional. También se ve afectado una mayor prevalencia de enfermedades crónicas, accidentes, entre otras determinantes. Por otro lado, el desarrollo económico y el proceso de urbanización generalizado contribuyen a incrementar el número de población urbana.
Si aumenta el número de discapacitados y la población que reside en ciudades, tenemos que preguntarnos: ¿cuán adaptadas están nuestras ciudades para suplir las necesidades de este sector?
Datos mundiales a futuro (enfermedades y discapacidades)
Claves para una Ciudad Accesible e Inclusiva
Una ciudad accesible a discapacitados debe ser inclusiva, segura y sostenible. Para esto es importante enfocarse en el desarrollo de tres aspectos fundamentales. Aquí el diseño urbano se convierte en pieza clave de cada uno.
El Aspecto Físico
Este aspecto contempla el diseño urbano. Plantea una infraestructura adecuada para los diferentes tipos de discapacidad,y, por ende, las diferentes necesidades.
Para las personas con discapacidades físicas, las barreras pueden variar desde rampas muy estrechas o con mucha pendiente, o de textura lisa que termina resultando resbalosa, mientras que para las personas con discapacidades de aprendizaje o aquellos en el espectro autista, el entorno metropolitano caótico y agitado puede resultar estresante.
Este aspecto contempla los lineamientos en temas de transporte, que es de vital importancia, ya que a través de este sistema uno se traslada al trabajo, a estudiar, al médico y otras actividades cotidianas. Este diseño contempla aceras amplias, ascensores, semáforos de voz, aceras señalizadas y con información en braille entre otros.
El Aspecto Económico
Este aspecto contempla el diseño y la infraestructura de las empresas pensado para optimizar la oferta de oportunidades laborales y de consumo.
Implica espacios de trabajo adaptados, edificios con accesibilidad adecuada, baños para discapacitados, que puedan caber las sillas de ruedas, espacios sin colores estridentes y con protección sonora y señalización sencilla y en braille.
Esto permite que las personas con discapacidad puedan participar de una manera activa en la economía como trabajadores y consumidores.
El Aspecto Social social
Implica el diseño en la adecuación de espacios que faciliten la interacción y participación de los ciudadanos.
Por ejemplo, parques con columpios adaptados; museos, centros comerciales, teatros, galerías entre otros, con guías formados sobre discapacidad; colegios de integración etc.
Sin embargo, en la práctica, Perú todavía tiene un largo camino que recorrer en el tema, ya que esta población encuentra a diario diversos obstáculos, como barreras físicas y sociales.
Las barreras les impiden acceder a sus centros laborales o de estudio. En consecuencia sus oportunidades laborales disminuyen, lo que los condena económicamente.
Por otro lado están las barreras sociales, como la falta de políticas y regulación de normativas que velen por los derechos de los discapacitados. En muchos casos, además, se padece la indiferencia de la gente.
Datos estadísticos discapacidad en el Perú
Para el caso de Lima por ejemplo, en el tema de transporte, la ciudad sigue siendo inaccesible. Si bien el metropolitano y el tren eléctrico han significado un cierto avance, los problemas persisten. Los buses de los diferentes corredores por ejemplo, no poseen acceso a silla de ruedas. Muchos de los paraderos atiborrados de gente en horas pico, son muy pequeños, sin espacio suficiente y sin rampas. Esta falta de infraestructura publica se repite en todo Lima. La ausencia de rampas en muchas calles, o la presencia de rampas de mucha pendiente, puentes peatonales de solo escaleras, semáforos sin voz, etc. Todo esto vuelve a Lima una ciudad enemiga de los discapacitados.
Precisiones sobre la accesibilidad
Al respecto, el arquitecto especialista en el tema de accesibilidad, Jaime Huerta menciona que no es necesario que toda la infraestructura de la ciudad sea accesible. Considera que es algo imposible, pero sostiene que sí es importante que espacios públicos como las principales pistas y calles, los municipios, hospitales y principales centros de entretenimiento tengan una infraestructura accesible.
“La gente debe entender que lo que es bueno para las personas con discapacidad también es bueno para ellos. Por ejemplo, las rampas son usadas por chicos que practican skate, también por quienes andan en bicicletas, además de los niños que usan mochilas con rueditas y las mujeres que llevan a sus bebés en coches, entonces de repente llega una persona en silla de ruedas que también las usa.»
En el tema de construcción y vivienda, los problemas de accesibilidad dependen de las municipalidades que son las que otorgan los permisos para las obras. Si bien las ordenanzas están dadas, no existe una fiscalización posterior que las haga cumplir. Además que la normativa todavía no está perfectamente hecha para que sea cumpla a cabalidad.
Aunque es destacable que si existen distritos que han presentado un avance considerable en el tema. San Isidro, Miraflores, Surco y San Borja, han generado cambios que deberían ser replicados en los distritos restantes.
Para Huerta se repite el círculo vicioso de la discapacidad: “a más pobreza, más discapacidad y más inaccesibilidad se reproduce en los distritos más pobres, en los conos de la ciudad. Los distritos que tienen cerros son inaccesibles. Los alcaldes inauguran escaleras que no auspician una verdadera inclusión”
Las Nuevas Leyes
Desde mediados del 70, existen leyes urbanas y arquitectónicas públicas y de uso público que no se cumplen. Por ejemplo, los proyectos de los programas de Mi Vivienda y Techo Propio, no cumplen tampoco con la normativa de accesibilidad, ya que al ser departamentos de menor costo, se busca construir la menor área posible, y por ende los espacios son más chicos, y esto origina accesos más estrechos, puertas muy angostas y escaleras que ocupen el menor espacio como las de caracol, a esto se le suma, ingresos a los edificios sin rampas, o rampas de mucha pendiente.
De igual forma, para personas con discapacidad auditiva, la ley de Radio y televisión del Perú, que establece que los programas informativos, educativos y culturales de producción nacional deben incorporar medio visuales donde utilicen lengua de señas o textos, lamentablemente esta ley se cumple solo parcialmente, existiendo aun muchos medios de comunicación convencionales que no ponen subtítulos ni tienen intérpretes de señas.
Datos discapacidad auditiva y visual
Debido a esas circunstancias es que, muchas de las personas con discapacidad, se ven limitadas a desarrollarse profesionalmente, si comentamos lo difícil que era movilizarse en la ciudad, el problema se agudiza en zonas rurales.
Datos discapacidad niñez y educación
El impacto en los menores
Los niños y jóvenes no están exentos del problema. Existen estadísticas que manifiestan la urgencia por reformar las leyes para lograr una educación inclusiva. Esta debe incluir a profesores capacitados y una infraestructura escolar pensada para ellos. Se debe incluir en las evaluaciones educativas bonos a los profesores y directores que valoran la educación inclusiva. Con su esfuerzo se pueden mejorar los resultados en sus alumnos.
Todo esto afecta el estado mental y emocional del discapacitado. Puede incluso tener como resultado un alto riesgo a que sufra de depresión. Jorge Castro, presidente de la Asociación Psiquiátrica del Perú, comenta que los discapacitados prefieren encerrarse en sus casas antes que tener que enfrentarse a la indiferencia de la gente. “En sus mentes se combinan dos problemas: uno interno y otro externo. La consecuencia más común es la depresión que avanza como una bola de nieve”, remarca Castro.
La familia y los amigos juegan ciertamente un papel fundamental en el proceso de superación de estas limitaciones.
“A un discapacitado se le debe reforzar la autoestima desde muy pequeño para que sienta que sus limitaciones no hacen una diferencia fundamental. La escuela es otro ámbito en el que se debe reforzar el concepto de igualdad e inclusión en niños sin discapacidades. Así se logrará una sociedad solidaria y sin discriminación”, apunta la psicóloga Antuanette Quiroz.
Es momento del cambio
Entonces, lograr ciudades accesibles es un desafío que no puede esperar en la agenda política del país. Si bien es vital que el tema entre en debate, es también importante que reconozcamos el avance logrado hasta el momento.
Existen diferentes organizaciones sin fines de lucro e iniciativas que buscan combatir este problema. Es destacable mencionar que con el tiempo, los microempresarios están empezando a apostar por este rubro. Por ejemplo, Safe City, la empresa especializada en accesibilidad y diseño universal, busca cambiar la mentalidad de los inversores. Aspira a que apuesten por invertir en propuestas que realmente suplan las necesidades de los discapacitados. Han tenido colaboraciones con el Metropolitano, y esperan intervenir en centros comerciales y diferentes puntos de Lima.
Entonces a medida que vayamos involucrándonos como parte de la solución, iremos logrando el cambio. Comencemos reflexionando desde la manera en la que percibimos a los discapacitados, hasta las actitudes que tenemos hacia ellos. ¿Cuantos de nosotros nos cruzamos en el día a día con un discapacitado, camino a trabajar, a estudiar, a comprar, a encontrarse con un amigo? ¿Cuantas veces nos detenemos a ayudarlos, a orientarlos, a cruzar la pista, a subir a un bus?
Seamos más empáticos, más considerados con las necesidades ajenas. Fomentemos la solidaridad, gastemos unos minutos de nuestro tiempo, y por supuesto compartamos la información. Mientras más gente esté informada al respecto, es mayor el impacto del cambio.
Autor: Dyana Ninahuanca
Material complementario:
Te puedes descargar el libro Discapacidad y diseño accesible, Jaime Huerta Peralta, Lima, 2007
https://docplayer.es/5005192-Discapacidad-y-diseno-accesible.html
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